Existe información que a los pilotos y aerolíneas les puede resultar muy útil para reducir el consumo de combustible durante el vuelo. Así por ejemplo, cuando los aviones se están aproximando a un aeropuerto, conocer la distancia al umbral de la pista donde se debe iniciar el descenso para aterrizar, o conocer con antelación si van a tener que realizar circuitos en el aire para esperar a poder aterrizar si hay mucha congestión, o saber el número de orden en el aterrizaje, o qué velocidad se les va a requerir para su aproximación final, todo ello, permitiría al piloto calcular la altitud y la velocidad adecuadas para realizar un descenso más eficiente reduciendo el impacto en ruido o el consumo de combustible.

Los controladores aéreos y los sistemas que utilizan podrían aportar esta información, pero no es una información que se aporte de forma procedimentada o que se calcule de forma directa. Además en momentos de alta congestión, proporcionar esta información supondría una sobrecarga para los controladores y por tanto problemas de seguridad.

El reto consiste en desarrollar una solución que proporcione esta información que pueda presentarse al piloto sin aumento de la carga de trabajo de los controladores.